IMPRESIONES 3

 10 de diciembre de 2016

Feriado puente último del año, me decidí de una para ver la exposición fotográfica de Davide Lachapelle en Usina del arte.  Durante el viaje en tren o servo por la ventanilla del tren como el viento agita la copa de los álamos en la estación de Banfield, me traen recuerdos de la casa de Capello.  Y en la exposición observo muy buena técnica mezclada con temas típicos de la mentalidad gay: postmodernidad con fin del orden natural, exaltación de la figura de nuestro Señor Jesucristo como una divinidad entre marginales tal como está representado entre marginales de Nueva York imitando la Última Cena de Leonardo (claro robo de la escena de "Viridiana" de Luis Buñuel, el neocolonialismo, la explotación del continente africano, mesías negro con enorme cruz dorada que subraya esperanza (en los años sesenta Fannon proclamaba lo mismo, de actualidad nada). Lo que ocurre con estás muestras fotográficas de gran calidad es que la misma no deja decodificar del todo lo que quieren transmitir, sin no sabes hacerlo te quedas fascinado pero no llegas a conocer la profundidad de la grieta que quieren excavar estos personajes elevados a la categoría martirial de forma errónea.  

Poca gente en avenida de Mayo que recorro, me parece que todos se reservaron para el domingo del Boca-River.  Me siento en Tienda de café con el ejemplar de la biografía de Curcio Malaparte.  Cuando cruzó Av de Mayo y Pellegrini veo chicos bañándose en la réplica de las cataratas del Iguazú...es un peligro nadie controla.  A mi lado en la vereda está Daniel Santoro pintor, escultor, cineasta, artista multifacético que es el autor de la escultura de Eva Perón ubicada en la pared del edificio del ministerio de Acción Social, cruza la esquina a la par de todos y entra a comprar medialunas en "Costumbres argentinas".