SRI AUROBINDO: EN BUSCA DEL SUPERHOMBRE ACUARIANO
Sri Aurobindo nació en Calcuta en 1872. Fue muy joven a estudiar a Inglaterra lenguas
clásicas, de las que tuvo gran dominio. En 1893 volvió a la India y se vinculó
con grupos revolucionarios, siendo encarcelado por un tiempo, que utilizó para
estudiar el Yoga, los Upanishad y el Baghavad Gita, libros sagrados de la
religión hinduista. Cuando sale de la
cárcel se aleja de los grupos insurreccionales y en 1910 funda el “Ashram”
(especie de convento, pero hinduista) en Pondicherry, en el mismo elaboró y puso
por escrito su cosmovisión. Aurobindo
afirmaba que se acercaba una nueva era, con un nuevo hombre. En la evolución del ser humano sería el
advenimiento de la vida divina sobre la tierra, ya que para los orientales
“Dios” es un estado en lugar de un ser.
Hay muchos estados por encima del estado mental. El estado supremo de conciencia se llama
Supramental. Este por ley de evolución
se impondría en la tierra y reinaría la felicidad. Para que ocurra esto es necesario una
revolución psicológica colectiva.
Siguiendo las tesis de Aurobindo, en el hombre habita “un ser interior
“diferente al cuer´po físico y mental, germen de la supraconciencia que anida
en cada elemento de la materia.
Despertar ese “ser interior” es el primer paso de su “yoga integral”. El estado más elevado, el supramental,
facilita la vida divina sobre la tierra, y sólo es alcanzado por los místicos y
gutrues. Lo real no existe, es ilusión,
todo es supreconsciencia. El supramental
es la consciencia que está en el corazón de la materia.
En 1920 se une a Mirra Alfassa, de
nacionalidad francesa, más conocida como “Madre” quien será su colaboradora y
continuadora. En 1926 Aurobindo se
retira del ashram para vivir en soledad, hasta su muerte en 1950.
Madre, que había nacido en París en 1878,
estudió arte, matemática, filosofía y ciencias ocultas. Siguiendo las enseñanzas de Aurobindo hace
edificar Auroville o la ciudad de la aurora.
También elaboró una práctica de yoga, el “yoga de las células”, destinada
a transformar las moléculas que forman el cuerpo humano en cuerpo
resplandeciente y vibrante. Se aplica
atravesando la materia, las capas de conciencia hasta llegar a la conciencia celular,
última realidad de la materia y la energía.
Utilizando el poder vibratorio de los mantras se transmutan las células
del cuerpo, y el adn con nueva información puede dar principio a un nuevo
ser. Madre murió en 1973 y su secretario
Satprem, también francés, quedó al frente de Auroville.
Satprem elaboró la síntesis de la doctrina de
Aurobindo y Madre, afirmando que la conciencia fuerza es la energía que anima a
las especies, al mundo entero, es el substrato mismo del universo.
Entre estas afirmaciones y el materialismo
dialéctico marxista hay una relación indirecta o no. El materialismo marxista
tiene tres presupuestos teóricos:
1)
El movimiento es interior a la
materia, que libera un principio dinámico activo en si mismo.
2)
El movimiento ordinario y
progresivo son cualidades que acompañan a la materia.
3)
El universo es producto de un
gigantesco proceso organizado dónde las cosas se relacionan en movimientos de
acción y reacción mutuas. El impulso interno que brota de la materia, de la
contradicción o lucha de sus elementos, la lleva hacia un desarrollo progresivo. A veces este desarrollo de la materia
´produce formas nuevas que surgen bruscamente como si la realidad diera un
salto.
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